El Gobierno peruano declaró durante la jornada del miércoles pasado el estado de emergencia en todo el país por 30 días, medida que implica la suspensión de los derechos de reunión, inviolabilidad del domicilio y libertad de tránsito, entre otros aspectos. Asimismo, se evalúa la posibilidad de declarar un toque de queda.
«Se ha aprobado declarar el estado de emergencia a todo el país, debido a los hechos vandálicos y violentos, toma de carreteras y caminos que ya son actos que se están estabilizando y que están siendo controlados por la Policía Nacional y por Fuerzas Armadas», dijo el ministro de Defensa, Alberto Otárola.
Las protestas en el Perú comenzaron a masificarse en casi todo el país, en especial en el sur, donde los manifestantes exigen convocar a una asamblea constituyente, el adelanto de elecciones, el cierre del Congreso, la dimisión de la Presidenta Dina Boluarte y la liberación del ex Mandatario Pedro Castillo, detenido tras su fallido autogolpe de Estado.